después de halloween

Me senté con mi computadora portátil para escribir un artículo sobre las mejores modas de la semana y me desmayé de cansancio antes de escribir nada. Ahora, un día después, así es como pasó Halloween para nuestra familia:

Solo quería desahogarme, pero debo decir que mi hijo pequeño es pan comido en comparación con las historias de terror que escucho sobre otros monstruos de su edad. Ella es un paseo por el parque (crucemos los dedos para que siga siendo así). Este Halloween fue su primera experiencia de truco o trato y lo admito, la mimamos. Desde el momento en que se despertó, papá le dio un poco de leche chocolatada europea que mi esposo creció bebiendo. Después del desayuno, se vistió con su disfraz de Moana y vimos a Shrek mientras le peinaba. Almorzamos en Bareburger y compartimos bebidas verdes inspiradas en Halloween en Starbucks. Decidimos hacer truco o trato y repartir dulces, así que nos abastecimos antes de irnos a casa.

Maui, Moana y un hada. Todos vestidos y finalmente listos para conocer a nuestros vecinos, Nyaeli tomó la mano de papá con fuerza mientras marchábamos de casa en casa. El concepto de caminar a las casas de extraños y tomar dulces de ellos era confuso para Nyaeli. Creo que Robert sintió la misma incomodidad de que tal vez le estamos enseñando la idea equivocada, pero después de la cuarta casa, entendió. Lo suficientemente bien como para susurrar "truco o trato" y decir "gracias" antes de pasar al siguiente. A la mitad de nuestra noche, regresamos a casa para repartir dulces. ¡Nyaeli se emocionó mucho al ver a todos los niños correr hacia su casa! Le entregó dulces a cada niño, hizo amigos y luego los siguió en su segunda ronda por el vecindario. A estas alturas, Nyaeli tenía 2 vasos pequeños de Reese y estaba trabajando en su tercero. Chocolate en una mano y papá en la otra. Maui, Moana y yo nos dirigimos a algunas otras casas antes de la cena. ¡Nyaeli corrió tan rápido, con tanta libertad y alegría! ¡Su felicidad simplemente nos llena de energía! Fue un final maravilloso para nuestro largo día.

Nyaeli cenó, se bañó y jugó el juego más largo del mundo de "... pero no estoy cansado", la edición de la hora de acostarse. Después de una hora de llorar en su cuna, se durmió. 4 am Me desperté de los gritos de Nyaeli, dejé mi computadora portátil y entré para la ronda 2. La Dra. Nyaeli se había convertido en la Sra. Hyde más linda. “Mami quiero leche”, “Dónde está papá”, “Quiero a Elmo”. Le di de comer leche; 10 minutos después, se acurrucó tranquilamente en mi pecho y comenzó a dormir. Se despertó "Quiero teta", "Quiero a mami", "Quiero acostarme con mami", todo mientras volteaba y se escondía en las sábanas. Levanté las manos por tercera vez esa noche. "Es hora de acostarte en tu cuna" Y pensé que iba a acelerar para otro festival de miedo, pero se tranquilizó y me metí en la cama para pasar la noche (err mañana).

Así que perdónanos si estamos un poco locos, con los ojos oscuros y cansados. Mientras Nyaeli dirige esta casa, papá todavía tenía que presentarse en su turno en el hospital. Mami está reuniendo sus pensamientos el tiempo suficiente para escribir esto (para que conste, ahora es viernes). ¿Mereció la pena? ¡Ahí le has dado! Tal vez ver Moana antes de acostarse no fue tan buena idea. Azúcar, luces brillantes y amigos; caso clásico de sobrecarga sensorial.